El mercado de Santa Catalina es el centro de un barrio de pescadores que lleva el mismo nombre. Los dos conviven con vecinos mallorquines de toda la vida y con modernos a la última.
El barrio está lleno de tiendas de decoración , restaurantes o cafeterias todos a la última moda y a la vez conserva tiendas de toda la vida. En el mercado podemos encontrar la misma combinación, los puestos de pescado, fruta o flores de siempre conviviendo con restaurantes de moda donde te cocinan lo que acabas de comprar o varias puestos con productos gourmet.
Es un mercado pequeño y muy caro pero, es al que iba con mi abuela cuando era pequeña y no está tan reformado como el del Olivar. Me gusta pasearme entre productos mallorquines y recordar.
Es el mercado más antiguo de Palma y es muy chulo darse un paseo para disfrutar de los colores y olores de los productos que ofrecen.
En la entrada todavía hay un señor vendiendo la prensa diaria.